Una avenida es más que una avenida




La avenida más importante de la Ciudad de México es “Paseo de los héroes Liberales del S. XIX” mejor conocida como Paseo de la Reforma, sin embargo muchas de las veces que la recorremos no prestamos atención a sus alrededores o a su historia misma; es por ello que en éste post se hablará de sus orígenes y los objetos culturales más importantes que la conforman.



En los años 1850, los ríos que existían en la Ciudad de México comenzaron a secarse poco a poco hasta desaparecer; en esos tiempos se encontraba “El Paseo Nuevo” – actual avenida Bucarrelli, nombrada a si por su creador Antonio María de Bucarelli y Urzua—, la cual tenía tres glorietas –es aquí donde comenzamos a reconocer elementos que se nos hacen familiares--.


Su primera glorieta estaba la “Fuente de la libertad” y fue representada con una figura que simbolizaba la patria, fue destruida para colocar una estatua de Benito Juárez; pero ésta nunca se realizó. Aunado a esto, los chinos donaron un Reloj a Porfirio Díaz el cual fue colocado en su lugar; sin embargo durante la Decena trágica el reloj sufrió daños y no fue hasta 1921 que fue remodelado.




La más conocida es la Ecuestre de Carlos IV conocida como “El Caballito”, y fue colocada en la entrada de la avenida en 1852; frente a ésta se habían colocado dos emperadores aztecas a modo de “vigilancia”, hasta que finalmente fueron trasladados a lo que actualmente es Indios Verdes.




Sin embargo, la Ecuestre fue trasladada en 1979 a la plaza Manuel Tolsa y fue sustituida en 1992 por el actual caballito –realizada por Sebastián—.





A sus alrededores de Bucarrelli se conservan edificios de las oficinas de los diarios más antiguos de México como son: El Excélsior y El Universal.




Cuando Maximiliano de Habsburgo llego al poder, tenía planeado mejorar las calles de la Ciudad a modo que se tuviera una distribución uniforme –basándose en calles Europeas— a su vez, hacer un camino que fuese de Palacio Nacional hasta Chapultepec de modo que resultara eficiente y es por ello que inició el “Proyecto Reforma”. En éste proyecto se visualizaba que las calles luciesen como en Francia/España. Sin embargo Maximiliano murió y no logro continuar con el proyecto. No fue hasta que Juárez lo retomo y decide llamarlo “Paseo de las leyes de reforma”.

Años más tarde, Porfirio Díaz lo retomo y decide llamarlo “Paseo de los héroes liberales del S. XIX”. A partir de 1895 se comienza a ver una calle amplia y espaciosa con muchos árboles, donde se encontraba una fuente de luz de gas –y poco a poco se agregó más iluminación—.


                Las glorietas que conforman la avenida Reforma, son:

·         Glorieta de Colón.- Se colocó a Cristóbal Colón como símbolo colonizador del nuevo mundo, el cual fue acusado por algunos pocos por ser la causa de haber eliminado muchas de las culturas indígenas.

             



·         Glorieta de Cuauhtémoc.- Se colocó al último emperador azteca como símbolo de combatientes de los conquistadores españoles, en ella aparecen los nombres de Cuitláhuac, Cacama, Tetlepanquetzal y Coanacoch. 




·         Glorieta de la Diana Cazadora.- Su nombre original es “Flechadora de la Estrella del Norte”, la escultura original se encuentra en Ixmiquilpan, Hidalgo –por decisión del regente Alfonso Corona del Rosal--.





·         Ángel de la independencia.- Como lo indica su nombre, fue colocada como símbolo de la Independencia de México, inaugurada el 16 de Septiembre de 1910 por Porfirio Díaz.




·         Glorieta de la Fuente de Petróleos.- Ésta fuente es símbolo de reconocimiento al esfuerzo de los técnicos mexicanos que mantuvieron en operación las instalaciones petroleras.




·         Glorieta de la palma.- Se encuentra una palma que se calcula fue plantada en épocas porfirianas y posee alrededor de 100 años; a pesar de ello la palma se encuentra en un perfecto estado.




Poco a poco se comienzan a construir edificios más modernos a los alrededores de Reforma entre los que encontramos la Torre Mayor, la Bolsa Mexicana de Valores.

Y también las familias comienzan a construir lujosas casas, sin embargo a partir de la segunda mitad del siglo XX, algunas casas fueron sustituidas por rascacielos llenos de oficinas y hoteles de lujo; llegándose a conocer como el centro financiero de la Ciudad de México.






Bibliografía:


Imágenes obtenidas de internet

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